La importancia de corregir bien una novela
Muchos
de nosotros ya tenemos acabado nuestro pequeño sueño. Han sido
meses o años de teclas, tazas de café e insomnio acumulado que
culminan en un documento de más de 300.000 mil caracteres. Y siento
ser yo quien te baje de la nube pero, por si no lo sabes, ese
manuscrito no es perfecto. Nuestra intención es siempre mejorar,
aprender y limar esos “pequeños” errores que todo primer
manuscrito tiene y hacerlo las veces que haga falta, hasta que llegue
a convertirse en algo que se parezca a una novela. Bienvenido al
tedioso mundo de la corrección.
En
primer lugar has de saber que la corrección es un paso tan
importante y vital como el de la escritura propiamente dicha. Salvo
contadas excepciones, publicar un primer manuscrito sin revisión es
tarea casi imposible.
*ARGUMENTO.
Lo primero que debemos preguntarnos es si hemos llevado a cabo el
plan original que teníamos en mente. ¿Están correctamente ubicados
los giros y los puntos de trama?. Al principio de todo relato tenemos
un mapa de la historia en la cabeza pero, ¿hemos conseguido plasmar
en palabras nuestra idea original?. Si nuestra novela es de género,
¿entra dentro de los patrones clásicos del mismo?. La mejor manera
de corregir un escrito en el universo literario
es
hacerse preguntas sobre nuestra obra y llegar a convertirnos en
nuestro peor jurado. Sólo así podremos hacer crecer nuestras
historias. Pero cuidado con pasar de revisar a volverte loco con las
faltas porque tampoco se trata de eso. En el termino medio esta la
virtud.
*PERSONAJES.
Absolutamente
ligados a las tramas, al final, son seres con entidad propia que
deben vivir, evolucionar y brillar al margen de los puntos de giro y
demás piruetas técnicas. Lo primero a comprobar es si han
evolucionado. Los personajes han de crecer, sufrir, llorar, cambiar,
amar, odiar, ser felices y vivir la más absoluta de las miserias. No
hay nada peor en una historia que un grupo de protagonistas planos e
insulsos y, lo peor, predecibles. Deben explicarse de manera adecuada
a su situación, educación, personalidad y estatus social. Un
personaje tiene que atrapar.
*ORTOTIPOGRAFÍA.
Siendo el más clásico es, a la vez, el más tedioso. Tildes,
ortografía, guiones y repeticiones han de ser cazados y eliminados
sin compasión. Es una de los puntos en los que puede merecer la pena
gastarse unos euros y pagar a un profesional.
Así que ya lo sabes, ponte a escribir pero luego, cuando acabes, comienza a corregir. Cómo decía un famoso escritor “Escribir es algo maravilloso; lo duro es tener luego que arreglar la mierda que hemos escrito”
Comentarios
Publicar un comentario